Los países que no jugarían el Mundial 2026 en EU por problemas políticos

Los países que no jugarían el Mundial 2026 en EU por problemas políticos

Foto: FreePik

El Mundial de la FIFA 2026, que será organizado conjuntamente por Estados Unidos, México y Canadá, podría enfrentar un desafío fuera del terreno de juego: las tensiones diplomáticas entre algunos países y el gobierno estadounidense. Aunque se espera un torneo histórico con la participación de 48 selecciones, ciertos conflictos geopolíticos podrían obligar a la FIFA a tomar decisiones logísticas delicadas.

 

Uno de los casos más relevantes es el de Irán. Las tensiones persistentes entre Teherán y Washington, sumadas a las restricciones migratorias que han existido en el pasado para ciudadanos iraníes, han encendido las alarmas en el entorno deportivo. Fuentes cercanas a organizaciones diplomáticas y deportivas internacionales han planteado la posibilidad de que Irán dispute sus partidos exclusivamente en México o Canadá, evitando así el territorio estadounidense.

 

Un escenario similar podría aplicarse a Venezuela, país que mantiene una relación ambigua con Estados Unidos. Aunque el conflicto diplomático no es tan agudo como en el caso iraní, los vínculos tensos entre ambos gobiernos podrían generar restricciones logísticas o complicaciones de visado para jugadores, técnicos y periodistas. De darse su clasificación al Mundial —lo que sería una primera vez histórica—, la FIFA podría reubicar sus partidos en otra de las sedes norteamericanas.

 

Además, Cuba es otro país cuya situación política podría generar problemas. Las restricciones de viaje para ciudadanos cubanos hacia Estados Unidos han sido una constante durante décadas. Aunque la selección cubana no ha clasificado a un Mundial desde 1938, un hipotético regreso plantearía desafíos similares.

 

La FIFA aún no ha emitido comunicados oficiales sobre estos posibles escenarios, pero expertos en política internacional y logística deportiva aseguran que el organismo tendrá que equilibrar la neutralidad deportiva con la realidad geopolítica.

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